domingo, 23 de abril de 2023

Nuestras lágrimas.





nuestras lágrimas serán,

salitre tangible,

calles vacias, 

desfiles retorcidos,

cubiertos de discursos 

hasta el delirio para

dejarnos dolores desconocidos  

abismales. 

incluso los muertos, 

asomados al abismo 

de los años

en el humo de mi isla

que flota, violenta, 

con la soledad de ciudades

apagadas, y la pasividad de

olores, de mieles, olvidadas.

el viento acuna 

con su ingravidez 

los alamos de 

prado y virtudes

las voces 

llegan desde tan lejos

una mezcla densa, y el olor

de una quemadura de asfalto

donde está una ciudad 

que no existe. 

un dolor sordo que

rasga, que no admite 

remedios caseros

cuándo, los fantasmas

de las putas de la calle Colón,

en una realidad que no existe,

me agarrarían, para abrazarme con

clemencia, o con la inquietud 

de quien necesita seguir adelante,

hablan sobre la desilusión, 

evidencian el fin, 

las desesperanzas

la emigración silenciosa. 

una mujer grita

la vida no era esto, 

una anomalía

alguien que desafía la ley

la realidad

aquí es como cuando

ausencia de amor cómo será, 

pregunto o la inquietud 

de quien necesita seguir adelante.